El próximamente serán las elecciones presidenciales; es éste uno de los
momentos más importantes de la participación responsable de los ciudadanos en
el gobierno de los pueblos y en la gestión pública. Votar no es sólo un derecho
sino también una obligación que sólo podemos ignorar por motivos graves.
El voto debes ser decidido con responsabilidad y libertad. No basta, sin embargo, votar libremente, sino desde la conciencia rectamente formada.
La primera condición para que el voto sea depositado en libertad es la buena información de los ciudadanos.
Las campañas descalificadoras e insultantes no ayudan a conocer los programas partidarios por lo que debemos, por nuestra cuenta y riesgo, interiorizarnos de las plataformas de los partidos políticos a los que pertenecen los postulantes a ocupar la presidencia.
A la hora de juzgar los programas no podemos pretender que resuelvan todos los problemas que la sociedad tiene planteados, pero sí podemos y debemos tener en cuenta si tienen propuestas para avanzar en su resolución y sobre todo si piensan subsanar aquellos que se han resuelto incorrectamente.
Sabemos que una misma fe puede conducir a compromisos políticos diferentes y que en algunas cuestiones, una propuesta electoral es una opción entre otras igualmente lícitas y válidas(Carta Apostólica "Octogesima adveniens, 50). En otras ocasiones, afectan directamente a bienes morales que son irrenunciables.
Para votar acorde a lo que pofesamos, deberemos valorar a quien promueva y defienda eficazmente los derechos fundamentales de la persona humana:derecho a la vida,la educación, el trabajo, la vivienda, la salud y a la información veraz entre otros.
Queremos subrayar nuevamente algunos aspectos de especial relevancia que será necesario considerar:
1.- RESPETO sin fisuras a la vida desde la concepción en el seno materno y hasta la muerte natural. Hay que tener presente a quienes son autores o han propiciado las leyes de "salud reproductiva"que bien sabemos incentivan la anticoncepción y encubren el aborto. Así mismo no olvidar a quienes consideran al enfermo, al anciano y al minusválido como una carga de la que muchas veces es necesario desprenderse, en aras a una mayor eficiencia económica y un mejor bienestar egoísta.
2.- APOYO claro y decidido a la familia fundada en el verdadero matrimonio, libre y vinculante entre el esposo y la esposa, monogámico y estable, respondiendo a sus necesidades con servicios que garanticen sus derechos. En muchas plataformas la verdad sobre la familia está amenazada, como institución natural, absolutamente necesaria para segurar el tejido social sin el cual el futuro de los pueblos se halla en grave peligro. Más aún, debido a una fuerte presión ideológica se diría que existe el propósito de desmontar pieza por pieza el edificio de la familia fundamentada en el matrimonio. No olvidemos que todo ataque a la familia lo es a la vida.
3.- APOYO a la calidad de la enseñanza para todos y garantía efectiva del derecho de los padres a escoger el modelo de educación que deseen para sus hijos.
4.- PROMOCIÓN de una cultura que dignifique la persona humana y respete las creencias religiosas, la ley natural y los valores morales que hacen al bien común.
5.- APLICACIÓN de políticas que favorezcan la solidaridad, la preocupación por lo social, el trabajo para todos, la moralidad en la vida económica, con una especial atención por los más desfavorecidos: los pobres, los niños, los ancianos, los inmigrantes, los enfermos y minusválidos. No debe olvidarse que el capitalismo salvaje y la dictadura del mercado provocan cada vez más la desigualdad y el crecimiento del desempleo.
Se debería crear y mantener una red de solidaridad real, que reconozca en todo hombre al hermano. Así la globalización será una verdadera globalización humana y humanizante y una auténtica "globalización de la solidaridad"( "Ecclesia in America"n.5.5).
6.- BÚSQUEDA sincera de la paz y de la reconciliación y fuerte condena contra todo tipo de violencia.
Con mucha fuerza digamos todos juntos para que nos ayude el próximo domingo: Jesucristo, Señor de la historia
El voto debes ser decidido con responsabilidad y libertad. No basta, sin embargo, votar libremente, sino desde la conciencia rectamente formada.
La primera condición para que el voto sea depositado en libertad es la buena información de los ciudadanos.
Las campañas descalificadoras e insultantes no ayudan a conocer los programas partidarios por lo que debemos, por nuestra cuenta y riesgo, interiorizarnos de las plataformas de los partidos políticos a los que pertenecen los postulantes a ocupar la presidencia.
A la hora de juzgar los programas no podemos pretender que resuelvan todos los problemas que la sociedad tiene planteados, pero sí podemos y debemos tener en cuenta si tienen propuestas para avanzar en su resolución y sobre todo si piensan subsanar aquellos que se han resuelto incorrectamente.
Sabemos que una misma fe puede conducir a compromisos políticos diferentes y que en algunas cuestiones, una propuesta electoral es una opción entre otras igualmente lícitas y válidas(Carta Apostólica "Octogesima adveniens, 50). En otras ocasiones, afectan directamente a bienes morales que son irrenunciables.
Para votar acorde a lo que pofesamos, deberemos valorar a quien promueva y defienda eficazmente los derechos fundamentales de la persona humana:derecho a la vida,la educación, el trabajo, la vivienda, la salud y a la información veraz entre otros.
Queremos subrayar nuevamente algunos aspectos de especial relevancia que será necesario considerar:
1.- RESPETO sin fisuras a la vida desde la concepción en el seno materno y hasta la muerte natural. Hay que tener presente a quienes son autores o han propiciado las leyes de "salud reproductiva"que bien sabemos incentivan la anticoncepción y encubren el aborto. Así mismo no olvidar a quienes consideran al enfermo, al anciano y al minusválido como una carga de la que muchas veces es necesario desprenderse, en aras a una mayor eficiencia económica y un mejor bienestar egoísta.
2.- APOYO claro y decidido a la familia fundada en el verdadero matrimonio, libre y vinculante entre el esposo y la esposa, monogámico y estable, respondiendo a sus necesidades con servicios que garanticen sus derechos. En muchas plataformas la verdad sobre la familia está amenazada, como institución natural, absolutamente necesaria para segurar el tejido social sin el cual el futuro de los pueblos se halla en grave peligro. Más aún, debido a una fuerte presión ideológica se diría que existe el propósito de desmontar pieza por pieza el edificio de la familia fundamentada en el matrimonio. No olvidemos que todo ataque a la familia lo es a la vida.
3.- APOYO a la calidad de la enseñanza para todos y garantía efectiva del derecho de los padres a escoger el modelo de educación que deseen para sus hijos.
4.- PROMOCIÓN de una cultura que dignifique la persona humana y respete las creencias religiosas, la ley natural y los valores morales que hacen al bien común.
5.- APLICACIÓN de políticas que favorezcan la solidaridad, la preocupación por lo social, el trabajo para todos, la moralidad en la vida económica, con una especial atención por los más desfavorecidos: los pobres, los niños, los ancianos, los inmigrantes, los enfermos y minusválidos. No debe olvidarse que el capitalismo salvaje y la dictadura del mercado provocan cada vez más la desigualdad y el crecimiento del desempleo.
Se debería crear y mantener una red de solidaridad real, que reconozca en todo hombre al hermano. Así la globalización será una verdadera globalización humana y humanizante y una auténtica "globalización de la solidaridad"( "Ecclesia in America"n.5.5).
6.- BÚSQUEDA sincera de la paz y de la reconciliación y fuerte condena contra todo tipo de violencia.
Con mucha fuerza digamos todos juntos para que nos ayude el próximo domingo: Jesucristo, Señor de la historia
te necesitamos!
Autor:
Asociación Civil EVA
No hay comentarios:
Publicar un comentario